El año 2024 ha llegado a su fin, y con él, podemos hacer un balance de cómo se han comportado los diferentes activos financieros. En este artículo, te cuento cuáles han sido las mejores y peores inversiones del año, qué factores han influido en su rendimiento y qué riesgos podrían estar asociados a estas valoraciones. Si estás pensando en invertir o simplemente quieres entender mejor el mercado, esta información te será de gran utilidad.
Los mejores activos de 2024
En 2024, tres activos han destacado por su excelente rendimiento: Bitcoin, las acciones estadounidenses de crecimiento (growth) y el oro. Veamos por qué han sido los ganadores del año.
1. Bitcoin: +121%
Bitcoin ha sido el activo más rentable del año, con una revalorización del 121%. Este impresionante rendimiento se debe, en gran parte, a la mayor facilidad para invertir en criptomonedas a través de ETFs (fondos cotizados en bolsa). Además, Bitcoin se ha beneficiado de la caída de los tipos de interés, ya que es un activo que responde positivamente a un entorno de tasas bajas.
2. Acciones estadounidenses de crecimiento: +33,1%
Las acciones de empresas enfocadas en el crecimiento a largo plazo también han tenido un año excepcional, con una rentabilidad del 33,1%. Estas acciones, que suelen pertenecer a sectores como la tecnología, se han visto impulsadas por la expectativa de que los tipos de interés sigan bajando. Cuando las tasas son bajas, los flujos de caja futuros de estas empresas se vuelven más valiosos, lo que aumenta su atractivo para los inversores.
3. Oro: +26,7%
El oro, un clásico refugio seguro, ha subido un 26,7% en 2024. Este metal precioso se ha beneficiado de dos factores principales: la caída de los tipos de interés y el aumento de los riesgos geopolíticos. Además, los bancos centrales han incrementado sus compras de oro, lo que ha contribuido a su revalorización.
Los peores activos de 2024
Por otro lado, algunos activos no han tenido un buen año. Los que peor resultado han tenido han sido la deuda pública estadounidense de alta duración y el euro.
1. Deuda pública de alta duración: -8,1%
Aunque los tipos de interés han bajado en 2024, los bonos del Tesoro de Estados Unidos con vencimientos a largo plazo han caído un 8,1%. Esto se debe a que los tipos de interés a largo plazo han subido, en contra de lo que cabría esperar. Los inversores parecen desconfiar de que la Reserva Federal (Fed) pueda mantener las tasas bajas en el futuro, especialmente ante la posibilidad de políticas inflacionarias bajo la administración de Donald Trump.
2. Euro: -5,5%
El euro también ha tenido un año difícil, depreciándose un 5,5% frente al dólar. Esta caída se debe a que el Banco Central Europeo (BCE) ha bajado los tipos de interés más agresivamente que la Fed. Como resultado, el dólar ha ganado atractivo frente al euro, ya que ofrece mayores rendimientos en los mercados de renta fija.
¿Por qué han subido unos activos y caído otros?
La clave para entender el rendimiento de estos activos en 2024 está en los tipos de interés. Cuando las tasas bajan, los activos que ofrecen rendimientos a largo plazo, como Bitcoin, las acciones de crecimiento y el oro, tienden a subir. Esto se debe a que el valor presente de sus flujos de caja futuros aumenta cuando el coste de oportunidad de esperar (los tipos de interés) es menor.
Por el contrario, los activos que dependen de tipos de interés altos, como los bonos de larga duración, sufren cuando las tasas caen. Además, en el caso del euro, la divergencia entre las políticas monetarias del BCE y la Fed ha jugado en su contra.
Riesgos implícitos en estas valoraciones
Aunque estos activos han tenido un buen o mal año, es importante recordar que los mercados son impredecibles. Aquí hay algunos riesgos a considerar:
- Cambios en las expectativas de tipos de interés: Si la Fed no baja las tasas tanto como se espera, o incluso las sube, los activos que han subido en 2024 podrían sufrir correcciones.
- Incertidumbre geopolítica: Aunque el oro ha subido por este motivo, un aumento de la tensión global podría afectar negativamente a otros activos, como las acciones.
- Volatilidad en las criptomonedas: Bitcoin ha tenido un año espectacular, pero su volatilidad sigue siendo alta. Un cambio en el sentimiento del mercado podría llevar a fuertes caídas.
Conclusión: ¿Qué podemos esperar en 2025?
El año 2024 ha dejado lecciones importantes para los inversores. Los activos que mejor se han comportado, como Bitcoin, las acciones de crecimiento y el oro, han sido impulsados por la caída de los tipos de interés. Por otro lado, los bonos de larga duración y el euro han sufrido por la desconfianza en las políticas monetarias futuras.
Sin embargo, es poco probable que esta radiografía se repita en 2025. Los mercados están en constante evolución, y factores como la inflación, las políticas monetarias y los riesgos geopolíticos podrían cambiar el panorama. Como siempre, la clave para invertir con éxito es mantenerse informado y diversificar.